Son poco más de 3.000 vecinos a los que cada aporte del Estado los beneficia. Para peor están lejos de la capital, a más de 100 kilómetros. En Taco Ralo necesitan soluciones siempre. Y por eso que se esté remodelando el viejo juzgado de paz cayó muy bien entre los vecinos, que saben que podrán concurrir al edificio en busca de Justicia, o al menos de realizar trámites que tengan que ver con el Poder Judicial. “Para nosotros esto es muy importante. Antes teníamos que ir a la ciudad, pero nos dicen que ahora por internet nos van a poder atender”, dijo Antonia Cafiero, quien habló por LA GACETA. Esto justamente es lo que pretenden en la Corte Suprema de la provincia: llevar soluciones y acercar la Justicia a quienes están más lejos. Esa es una de las premisas del master plan ordenado por la Corte para ampliar, modernizar y en algunos casos crear nuevos Juzgados de Paz en toda la provincia. La idea que promueven es la de brindar a los vecinos soluciones y que, en muchos casos, no deban trasladarse a la ciudad para realizar trámites que podrían solucionarse en sus propios pueblos o ciudades.
Avanza la remodelación de los Juzgados de Paz en la provinciaLa semana pasada se hizo un relevamiento en los Juzgados de Taco Ralo y de Atahona, en el sureste de la provincia. Y esta próxima semana será el turno de Los Puestos.
Avanza la implementación del Sistema de Administración de Expedientes en Juzgados de PazLas obras fueron supervisadas por los vocales de la Corte Suprema de Justicia, Antonio Estofán y Eleonora Rodríguez Campos, quienes estuvieron acompañados por equipos de la Dirección Técnica.
En el caso de Taco Ralo, se trata de una serie de trabajos en el edificio ubicado en la intersección de las calles San Juan y Buenos Aires, donde habrá una readecuación de las instalaciones existentes, abarcando una superficie de más de 180 metros cuadrados; el trabajo que se está realizando en el Juzgado de Paz de Atahona, en tanto, contempla una importante ampliación del edificio actual, por lo que el espacio se extenderá también más allá de los 100 metros cuadrados. “En ambos casos, se trata de proyectos arquitectónicos de destacada envergadura para las comunidades de Taco Ralo y Atahona, y que permitirán a los juzgados contar con una mesa de entradas, sala de usos múltiples con vistas a funcionar como sala de audiencias y una pérgola para realizar casamientos al aire libre, entre otras comodidades”, se indicó en el informe oficial. Cafiero aseguró que los vecinos muchísimas veces debían hacer incluso viajes grupales, sobre todo por causas de familia (filiación, alimentos, discapacidad), y que la presencia de un Juzgado de Paz con capacidad de resolver esos problemas es fundamental. “Tener a alguien aquí que nos ayude, o poder tener contacto por internet con un juzgado es muy importante”, dijo la mujer.
A mediados de abril la Corte había dado inicio al Plan de Capacitación Integral destinado a jueces de Paz, funcionarios y empleados de Juzgados de Paz Legos y Letrados, enmarcado dentro de las políticas que está llevando adelante la Corte para optimizar el servicio de justicia en todo el territorio provincial. En ese momento, Rodríguez Campos destacó que la formación de los operadores de la Justicia de Paz es fundamental para conseguir un mejor servicio de justicia en la que es la primera puerta de acceso al Poder Judicial para muchos habitantes de la provincia. Y el presidente de la Corte, Daniel Leiva, se había referido a los trabajos que se vienen desarrollando, a los cuales definió como una política de la Corte con una proyección ambiciosa, que es la de brindar un servicio de atención primaria de primer nivel en cada rincón de la provincia. “En la medida en que la atención es de calidad, las personas pueden resolver sus problemas sin la necesidad de salir de su comunidad, y eso hace que las sociedades funcionen mejor”, dijo. “A partir de que tomamos la decisión de avanzar en una mejora de la Justicia de Paz, dividimos a la provincia en cuadrantes y en cada uno de ellos hemos abordado distintas intervenciones; en otros espacios hemos emprendido obras nuevas, siempre apuntando a mejorar el acceso a Justicia en cada lugar”, agregó. En el caso del juzgado de El Timbó, por ejemplo, se creó la sala multifueros, que posibilita a los ciudadanos la resolución de sus problemas sin pasar por un centro judicial.
Tucumán cuenta actualmente con 69 Juzgados de Paz. Desde mayo del año pasado comenzaron a dictarse capacitaciones para la implementación del Sistema de Administración de Expedientes (SAE), realizadas por el Equipo de Apoyo a la Justicia de Paz de la Corte, la Dirección de Sistemas y la Superintendencia de Juzgados de Paz y están destinados a empleados y empleadas de dichas oficinas, con el fin de lograr que el sistema se encuentre en pleno funcionamiento para finales de este año.
Visitas a los diferentes juzgados
En las últimas semanas, distintos vocales de la Corte visitaron las obras en los juzgados de Paz de Lules (que tiene un avance de un 85%), de Gobernador Garmendia y de La Ramada, que ya están finalizadas y de Atahona con un 31% de avance en la obra. Por otro lado, se encuentran con diferentes niveles de avance las obras en los Juzgados de Paz de Bella Vista, Delfín Gallo, Tacanas, Los Puestos, Alpachiri, Los Sarmientos, Juan Bautista Alberdi, La Cocha, El Mollar y Amaicha del Valle. El plan incluye además la refacción y puesta a punto de otros 30 Juzgados de Paz en el interior de la provincia, con distintos niveles de avance y fechas de inicio.